24 ago 2013

¿¿Será posible??

Esto es para reírse, ó para llorar?? Juzguen ustedes...
Muchos habréis visto en mi muro de facebook, que estoy en contaje regresivo, esperando ansiosamente, los 14 dias que faltan para que nazca mi nieto. Pues ayer estaba con la embarazadísima y el abuelo, y no había nadie más, ni falta que hacía, porque la enferma, es decir yo, a esa hora está muy tranquilamente sentada delante de su ordenador.
Mi hija fue al baño y parece que vió una cucaracha (para ella todas las cucarachas son enooormeees). Puede ser que fuera grande, que entrara por la ventana, porque en casa no hay cucarachas, sencillamente porque me repugnan y a la menor alerta ya llamo al especialista.
Cuando yo estaba bien, acudían a mí ó iba yo al escuchar el estridente grito: "¡¡¡ Maamaann!!!"
Ayer no gritó, vino al salón y dijo: "Angel, hay una cucaracha en el baño, vienes a matarla?". Angel cuando vió que la cosa iba con él, se quitó tranquilamente los cascos y dijo: "¿Heen?". Mylena repitió su historia, el abuelo dijo "Voy", se puso a buscar sus zapatillas, se las calzó, empujón a la mesa donde reposa los pies sobre un cojín, y finalmente se dirigió al foco del problema, donde le oí dar zapatillazos a lo loco... Y volvió diciendo: "Se había ido..."

Por mucho que lo intente, a veces cuesta aislarse de este tipo de episodios tan, tan, tan... Es que no me sale el adjetivo.
Espero que mi nieto sea más valiente, sobretodo más sensato...

11 ago 2013

Higiene del enferm@


Hace tiempo que quería escribir unas palabras sobre cuidado e higiene de las personas dependientes. Por aquellos que no tienen capacidad de comunicarse, quiero decirles a sus cuidadores, mujeres y hombres, ya sean familiares ó empleados, que de todas las cosas que no podemos hacer, creo que lo más duro es el aseo.
Para mí por lo menos, es impensable pasar un día sin ducha. Hay que ingeniarselas como sea, mientras se pueda, para duchar al enfermo. Cuando resulte imposible porque el paciente esté definitivamente en la cama, se busca una ayuda para la hora del aseo. Entre dos personas con un poco de maña y principalmente buena voluntad, se puede lavar al enfermo perfectamente, y cambiarle la ropa de la cama.
Algo importante y que todos los cuidadores tienen tendencia a olvidar  es secar bien todos los pliegues.
Debajo de la tripa "y no es una gracia", hasta yo que no estoy especialmente gorda, al estar siempre  sentada, se me  forma un "michelín" que no puede quedar mojado porque se forman heridas, que duelen... A nosotras ya no nos pasa. Las axilas, las ingles, los oídos... nada más desagradable que tener agua en los oídos. Hay que secar con bastoncillos, pero ¡ATENCIÓN! no te pongas a hablar por teléfono, escuchar música, ó a pensar en las musarañas, mientras insertas el bastoncillo hasta no se sabe dónde... Y luego las orejas, no olvides todos los rincones, delante y detrás. Las uñas de pies y manos.
Que más? Los ojos, a mí me pican y lagrimean con el cansancio. Bueno, pues bien, aunque parezca mentira hay gente que no se da cuenta de que hay  que limpiar los ojos, partiendo del canto interior hacía el exterior (hay por aquí un despistado que una vez me secaba las lágrimas, empezando del exterior del ojo derecho pasando por el tabique nasal como sobre un puente, hasta la esquina del ojo izquierdo). Una vez puede tener gracia, pero no más...

Dicho sea de paso, que todo se aprende sobre la marcha, aunque no estaría de más que en este país, donde tanto dinero se "pierde", hubiera un presupuesto para enseñar a cuidar. Para bien de enfermos y cuidadores, que muchas veces se lesionan por falta de técnica.